Conceptos para trabajar en el aula 'Quiero ser como Trótula'

Ginecología: es la especialidad médica que se ocupa del sistema reproductor femenino (útero, vagina y ovarios).

Obstetricia: es la especialidad médica que se ocupa del embarazo, el parto y el puerperio. Como especialidad médica se suele combinar con la anterior, bajo la disciplina conocida como obstetricia y ginecología.

Matronería: es la profesión que se encarga del embarazo, el parto y el puerperio (incluyendo la atención del recién nacido), además de la salud sexual y reproductiva de las mujeres a lo largo de toda su vida. En España la matronería es una especialidad de Enfermería. En la sanidad pública de nuestro país, el seguimiento del embarazo lo realiza la matrona. El ginecólogo participa indicando las analíticas pertinentes, y realizando y valorando las ecografías.

Historia de la matronería: Las matronas, las comadres y las mujeres en general han acompañado nacimientos desde la Antigüedad, de ahí que la profesión se denomine en femenino. Como explican en El parto es nuestro, “hasta bien entrado el siglo XVII, fue exclusivamente un trabajo de mujeres, donde los hombres no sólo no tenían cabida, sino que tenían prohibido, por ley, por religión o por cultura, tener relación con los partos, las menstruaciones y, en general, otros aspectos íntimos de lo femenino. Tampoco había una formación reglada; era más bien un saber empírico transmitido de madres a hijas, o de mujeres a otras mujeres, sin base científica ni afán investigador”. Este oficio da el salto a la ciencia cuando los varones, a través de la figura del obstetra, se introducen en el terreno de la partería. En ese momento los hombres asumen el control de los embarazos, los partos y los puerperios y muchas mujeres son relegadas, ya que no tenían acceso a la educación universitaria y a las ciencias.

Puerperio: Este periodo comienza en el parto y acaba cuando el cuerpo femenino recupera la normalidad, tanto desde el punto de vista fisiológico como anatómico. La extensión del puerperio es variable, puesto que cada cuerpo pasa por procesos muy diferentes y mientras que para unas mujeres dura 6 semanas, para otras puede prolongarse hasta un año.

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